Agyness Deyn, diario de una it girl

Es una de las "It Girls" (término que define a chicas con encanto y popularidad desmedida, que no tiene por qué ser proporcional a sus cualidades objetivas y que tiene un matiz pasajero o temporal) del momento.

La androginia, el desmedido peroxidado de su pelo corto, las camisetas "oversize" con mensaje, el pitillo imposible, las botas de cowboy, foulard o (¡¿todavía?!) palestino y unas gafotas de plástico y colorinchi son sus señas de identidad.

Repasamos su historia y su histeria y te damos las claves para seguir el estilo "Aggy".

De "Laura la patatera" a "Agyness la SuperTop"

Agyness (pronúnciese simplemente "Agnes") era muy distinta antes de convertirse en chica fetiche de House of Holland o imagen publicitaria de Burberry, Mulberry, Giorgio Armani, Gianfranco Ferré y Paul Smith, entre otros. Antes de desfilar para absolutamente todos los grandes diseñadores, de ser dos veces portada de Vogue y realizar editoriales de moda en las revistas más prestigiosas, esta joven inglesa vendía patatas fritas en un suburbio al este de Manchester y se llamaba Laura Hollins.

Fue uno de sus clientes, el diseñador Henry Holland, el que decidió llevársela a Londres para hacerse un hueco en la industria de la moda. Gracias a los dos, el éxito de las camisetas con ácidos textos de la marca House of Holland creció como la espuma.

La base del "Aggy look"

¿Y qué hubiera sido de nuestra pequeña Aggy sin su rubio rubísimo?

Posiblemente se hubiera quedado en Laura, ya que una gran parte del éxito de este look renovador de la Deyn se lo debe a su pelo. Ya desde adolescente le había gustado cambiar de color, llegando a llevarlo incluso rosa, pero no fue ella sino Sam McKnight (estilista de cabecera de Kate Moss, entre otras) el que en una sesión de fotos con Mario Testino decidió "cortar y blanquear".

Tanto ha popularizado ex-Laura este peinado que ha comenzado, según los medios fashionistas, a estar quemado (suponemos, más en el sentido literal y figurado) así que decidió cambiárselo a moreno. Pero cuando una se siente rubia, poco puede hacerse en contra, así que recientemente la hemos vuelto a ver con su característico platino.

Icono

El pasado mes de Mayo, la tendenciosa revista i-D sacó una batería de portadas (seis distintas, de la mano de fotógrafos como Terry Richardson, Alisdair McLellan, Matt Jones o Billy Sullivan) con una sola protagonista: Agyness. En el interior, disfrutamos de unos desnudos que hizo para Nick Knight (fotógrafo que ya desnudó a la Moss o Coco Rocha, previos iconos de la revista).

Que la chica es un icono no se discute, ya que tanto la moda como el pueblo sigue sus dictados. Que se pone un Burberry Knight Bag, todas a comprárselo; que se tiñe de rubia, todas rubias; que los demás nos dicen que los pitillo no se llevan, pues nosotros los seguimos llevando porque a Aggy le gustan. Y punto.

La nueva Kate

Inevitablemente, mucho se ha comparado a esta modelo con la sin par Kate Moss. Y no es de extrañar que dos lánguidas y no muy altas (la Moss no alcanza el metro setenta, Agyness lo rebasa por escasos 3 centímetros) rubitas británicas, que tanto han destacado entre las eslavas maniquíes en las pasarelas internacionales y que han representado (ahora ya ninguna de ellas lo hace) a la casa Burberry por encarnar el nuevo estilo "brit", sean comparadas hasta la saciedad.

Por si no fuera poco, a esta jovencita también le van los rockeros y la música, como a Kate. Tras tener una relación con el líder de "The Paddingtons", la modelo está saliendo con Albert Hammond, integrante de los Strokes.

Un, dos, los micrófonos

Y demostrando que Carla Bruni, Bimba o la Moss no son las únicas modelos que cantan, Agyness se plantó frente a un amplificador para demostrar a la industria lo que valen sus gorgoritos.

Aquí podéis ver el videoclip de 'Who' del grupo Five O'clock Heroes en la que la modelo (con una sombra de ojos que ya quisiera para sí Amy Winehouse) prestó su voz. Esa voz, por cierto, nos suena un poquito a Alvin y las Ardillas o Kate Bush y, por supuesto, nos encanta.

Además de esta colaboración, Agnes tiene su propia banda de punk, los Lucky Knitwear, con la que da rienda suelta a sus agudos por doquier.

¿Pueblerina yo?

Podríamos considerar a esta chica, que fue nombrada modelo del año en la pasada edición de los British Fashion Awards, como un referente perfecto; pero la perfección se puso en juego al publicar Pérez Hilton un artículo en el que la calificaba como una vulgar diva de provincias desaliñada pero chic.

Parece que poco a poco la "Biblia envenenada" más temida por las celebrities se ha ido retractando y ha terminado por (cómo no) adorar a la modelo, siempre con su particular tira y afloja.

Alejandro Durán

Publicado en Chueca.com el 07/07/08